Una solución sostenible a base de nopal está inspirada en técnicas de construcción ancestrales, combate la pobreza y la contaminación por PVC, ofreciendo pisos dignos y frescos para comunidades mexicanas
Por Samantha Nolasco
Datos clave:
- Composición de las losetas sostenibles se basan en cal, arena y baba de nopal, reforzadas con PVC granulado.
- La baba de nopal constituye entre un 15% y 20% de la composición.
- También se ha logrado una formulación con cero agua, utilizando nopal molido completo, lo cual es valioso para comunidades sin acceso a agua.
- 112.5 toneladas de PVC podrían cubrir 430 pisos.
- 1/3 parte de impacto ambiental del uso de mortero y cal en comparación del cemento.
- “Piso Firme”, iniciado en Coahuila en el año 2000 y expandido a nivel nacional, logró instalar 2.7 millones de pisos de cemento en todo México para 2012.
- Una evaluación de impacto de 2006, difundida por CONEVAL, mostró que los niños menores de seis años en hogares beneficiados por el programa tuvieron casi un 20% menos de parásitos, una reducción del 13% en la diarrea y una disminución del 20% en la anemia.
- El programa también tuvo un impacto positivo en el bienestar mental de las madres, con una reducción del 12.5% en los niveles de depresión y un 10.5% en el estrés percibido.
¿Qué pasaría si la solución estuviera en una planta tan icónica de nuestra región como el nopal?
Existe un problema que en pleno Siglo XXI afecta a más de 1.5 millones de hogares en México, los pisos de tierra son una realidad que expone a niños y adultos a enfermedades gastrointestinales, infecciones respiratorias e incluso tétanos.
Y seguramente tienes o has tenido una tarjeta de crédito que tiene una fecha de vencimiento marcada, imagina que en el mundo muchas personas también tienen, no sólo una, sino varias de esas tarjetas que están fabricadas con PVC, un material que no es reciclable de forma tradicional.
Lo que implica que la quema de estas tarjetas liberaría gases tóxicos y compuestos volátiles muy peligrosos a la atmósfera, nos explica Victoria de León, ingeniera por el Tec de Monterrey y una de las jóvenes promesas latinoamericanas en innovación con proyectos diseñados para el espacio.
Aquí es donde entra Tlatec, un proyecto de Victoria de León pensado en aprovechar los recursos que se tienen en México y al mismo tiempo dar una respuesta de economía circular a los desechos de tarjetas hechas con PVC.
Tlatec que podría interpretarse como “tecnología de la tierra”, de la raíz “Tláli” -tierra en náhuatl- y “Tec”, como abreviatura de la palabra tecnología, fusiona la innovación con “técnicas ancestrales mexicanas” para transformar desechos en soluciones sostenibles y de alto impacto en la vida de comunidades de bajos recursos.
¿Por qué un piso de tierra es un indicador de precariedad?
El rezago habitacional en México abarca deficiencias en la calidad de los materiales de construcción, el acceso a servicios básicos y el hacinamiento. En este contexto, la presencia de pisos de tierra en las viviendas constituye un indicador crítico de precariedad habitacional, con profundas implicaciones para la salud, el bienestar social y el desarrollo económico de las familias.
La vivienda digna, reconocida como un derecho humano fundamental, es un pilar esencial para el desarrollo integral de las comunidades y la reducción de la pobreza. La calidad del entorno habitacional influye directamente en la salud de sus ocupantes, su seguridad y su capacidad para prosperar.

Y aunque hoy día las cifras son importantes, ha habido iniciativas desde los gobiernos estatales y a nivel federal que combatieron este problema, “el simple hecho de ponerles un piso les cambia la vida a las personas”, menciona Victoria quien se ha documentado en el tema, sobre los impactos significativos de pisos firmes en viviendas que antes no lo tenían.
¿Qué programa sentó las bases para dignificar la vivienda?
El programa “Piso Firme” tuvo sus orígenes como una iniciativa estatal en el estado de Coahuila, lanzada en el año 2000 bajo la administración del entonces gobernador Enrique Martínez. Su éxito en la mejora de las condiciones de vida y salud en esta entidad sentó un precedente importante. La evidencia de sus resultados positivos en Coahuila fue fundamental para que el programa escalara a una iniciativa de alcance nacional.
Una evaluación de impacto de esta política pública en 2006 cuyos hallazgos fueron comunicados por CONEVAL proporcionó pruebas contundentes de los beneficios del programa en la salud pública. Los resultados fueron particularmente relevantes para la población infantil:
-El programa instaló pisos de cemento en más de 34,000 viviendas en Coahuila
-Los niños menores de seis años que vivían en hogares beneficiados por el programa presentaron casi un 20% menos de parásitos.
-Se observó una reducción del 13% en la prevalencia de diarrea entre estos niños.
-Las tasas de anemia disminuyeron en un 20% en los niños de hogares que participaron en “Piso Firme”, en comparación con aquellos que no fueron beneficiarios.
Un aspecto notable de los beneficios del programa fue su impacto en el bienestar psicológico de las madres. Se documentó una reducción del 12.5% en los niveles de depresión y una disminución del 10.5% en los niveles de estrés percibido en las madres beneficiarias.
El PVC: ¿un desafío o una oportunidad?
Las tarjetas de crédito y otros desechos de PVC son un dolor de cabeza ambiental. Su reciclaje tradicional es casi inviable debido a la emisión de gases tóxicos y, en el caso de las tarjetas, la presencia de chips metálicos complican totalmente la logística. Ante este panorama, Tlatec propone una solución ingeniosa.
Moler el PVC para utilizar eso como agregado en un caso de aplicación específica”, describe Victoria.
La gran ventaja de la formulación de Tlatec es que “mezcla todo, o sea, hasta el chip”, eliminando uno de los mayores obstáculos para el reciclaje de tarjetas y evitando la quema que libera contaminantes.
La magia del nopal: ingeniería ancestral para el futuro

La base de esta solución es el nopal, una planta que abunda en el territorio mexicano. El secreto está en su mucílago, esa “baba muy viscosa” que actúa como un “agente de unión”. Además, las fibras del nopal sirven como refuerzo estructural.
Este conocimiento no es nuevo. Los antiguos mayas y los constructores del Templo Mayor de Tenochtitlán ya utilizaban la baba de nopal con cal y arena para dar mayor resistencia y proteger estructuras.
Tlatec retoma esta sabiduría para crear losetas sostenibles de 30 x 30 x 1.5 cm a base de cal, arena y baba de nopal, “reforzadas con PVC granulado”. El método de extracción de la baba es simple: reposo en agua por dos días, filtrado y envasado, sin necesidad de calor ni químicos.
El proceso de fabricación de las losetas es sorprendentemente sencillo, similar a la preparación de concreto, y se seca al aire libre. El resultado es un material que no solo es ecológico sino funcional:
- La baba de nopal es impermeabilizante, ofreciendo una protección natural al suelo.
- A diferencia del concreto, permite que “respire la tierra”, lo que evita la acumulación de humedad, la proliferación de hongos y mantiene las casas más frescas, un beneficio crucial para viviendas sin aire acondicionado.
- Al colocarse sobre “la tierra no pierde su fertilidad tampoco”.
- El impacto ambiental es una tercera parte que el del cemento Portland, que genera 900 kg de CO₂/ton frente a los 200-400 kg de CO₂/ton del mortero de cal y arena, parcialmente reabsorbidos por carbonatación.
- Los costos son muy bajos al utilizar materiales locales y abundantes como la cal, arena y nopal.
Un futuro circular y con impacto masivo
El potencial es enorme, con sólo 3.6 toneladas de PVC de desechos (equivalentes a 720,000 tarjetas reemplazadas para 2027), se podrían instalar pisos en hasta 13 casas de 30 metros cuadrados cada una.
Además, estas losetas son parte de un modelo de economía circular: tras su ciclo de vida de 15-20 años, pueden pulverizarse para formar nuevas, incorporando sólo un 15-20% de material nuevo ya que la mezcla de Tlatec utiliza un 10-20% de plástico molido.
Victoria de León, la ingeniera detrás de Tlatec, visualiza un modelo de implementación que involucre a las comunidades, similar al programa “Caminos Artesanales” de Oaxaca. La “proyección ideal” es que “a futuro incluso las comunidades en cada región puedan hacer sus propios pisos”.
Tlatec nos recuerda que en nuestra propia cultura y recursos, puede haber soluciones a problemas urgentes y construir un futuro más justo y sostenible para México.
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- ¿Qué otras técnicas ancestrales crees que podríamos “rescatar” para soluciones modernas?
- ¿Qué responsabilidades deberían asumir las grandes empresas con sus desechos como el PVC de las tarjetas?
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