LATANK
SUSCRIBIRSE
Close
En el marco del Simulacro Nacional 2025 en México, te presentamos las soluciones ante sismos probados en América Latina que salvan vidas y reducen riesgos ante los terremotos

Las soluciones que salvan vidas en América Latina ante los sismos

Las soluciones ante los sismos combina el rigor gubernamental, la innovación tecnológica y la participación de la comunidad

En una región marcada por la actividad sísmica, la preparación es la diferencia. A pesar de los constantes desafíos, varios países de América Latina han liderado la implementación de soluciones que, con evidencia comprobada, mitigan los daños de los terremotos. Desde códigos de construcción reforzados hasta sofisticadas alertas tecnológicas, la clave es una estrategia multifacética que combina el rigor gubernamental, la innovación tecnológica y la participación de la comunidad.

Las soluciones más efectivas y su impacto

Estas son algunas de las medidas que han demostrado tener un mayor impacto en la reducción de víctimas y daños materiales.

1. Códigos de construcción y su cumplimiento

Considerada la medida más efectiva, Chile y México, han demostrado su eficacia con normativas muy estrictas. En Chile, un sismo de 8.2° en 2014 dejó solo 6 muertos, una cifra mínima que se atribuye directamente a las estructuras reforzadas.

  •  Japón ha liderado esta solución desde el Gran Terremoto de Kanto en 1923, actualizando sus códigos continuamente. Nueva Zelanda también tiene uno de los códigos más avanzados, impulsado tras el sismo de 1931.

2. Sistemas de Alerta Temprana Sísmica

Estos sistemas no previenen el terremoto, pero salvan vidas al dar segundos vitales para reaccionar. México es un pionero con el SASMEX, que desde 1993 ofrece hasta 30-50 segundos de ventaja antes de que las ondas destructivas lleguen a la Ciudad de México. La posibilidad de resguardarse o cortar servicios críticos en ese lapso ha evitado innumerables accidentes.

  • Japón  también tiene un sistema nacional de alerta, J-Alert, que difunde advertencias en todo el país. En Estados Unidos, el sistema ShakeAlert se está expandiendo para enviar alertas directamente a los celulares.

3. Simulacros y educación masiva

Una población preparada es una población segura. Chile y México también han invertido en una cultura de prevención a través de simulacros nacionales recurrentes. En Chile se realizan cada abril; en México, el 19 de septiembre es una fecha de gran movilización ciudadana. Esta educación, que enseña a “agacharse, cubrirse y agarrarse”, minimiza el pánico y asegura que las personas actúen de manera correcta, lo que indirectamente salva vidas.

4. Tecnología de infraestructura

La ingeniería antisísmica avanzada, aunque costosa, tiene un alto retorno en vidas salvadas y daños prevenidos. El uso de aisladores de base y disipadores de energía en edificios críticos y puentes, cada vez más comunes en Chile, ha demostrado reducir significativamente la aceleración del suelo, protegiendo las estructuras.

5. Ordenamiento territorial y planes de emergencia

Estas medidas previenen la exposición al riesgo. La zonificación de riesgo, como los mapas de microzonificación en México y El Salvador, restringe la construcción en áreas vulnerables. El monitoreo por satélite y las redes sísmicas de alta densidad son comunes en países desarrollados, permitiendo una modelación precisa de escenarios y la planificación de respuestas.

La evidencia de América Latina y las mejores prácticas globales de países como Japón y Estados Unidos convergen en un punto: la mitigación sísmica más efectiva es aquella que combina políticas gubernamentales sólidas, tecnología avanzada y una cultura de preparación ciudadana. Los avances en la región son notables, pero el desafío es cerrar las brechas de cobertura y cumplimiento para maximizar la eficacia preventiva y proteger a las comunidades ante el poder de la naturaleza.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

¿Quieres estar al día?

¡SuSCRÍBETE Y NO TE pIERDAS NADA!