Buscan responder a crisis humanitarias y fortalecer la preparación ante desastres en una región golpeada por el cambio climático y la violencia.
Hay noticias que no deben pasar desapercibidas; la Unión Europea anuncia que destinará 120 millones de euros en 2025 a ayuda humanitaria para América Latina y el Caribe.
Un compromiso que llega en medio de una tormenta
Venezuela, Colombia y Haití encabezan la lista de prioridades. Países marcados por violencias estructurales, migración forzada, crisis climática y abandono institucional, pero sobre todo, habitados por personas que siguen resistiendo, organizándose y soñando, a pesar de todo.
Hadja Lahbib, comisaria europea para la Gestión de Crisis, dijo:
La UE reafirma su firme compromiso de apoyar a las comunidades más vulnerables”
¿Qué se va a financiar con este dinero?
Venezuela recibirá 38 millones de euros. Para proteger a los más vulnerables, y cubrir necesidades básicas como salud, educación y nutrición. En un país donde 20 millones de personas necesitan ayuda humanitaria, esto es apenas un salvavidas.
Colombia tendrá 21 millones, para apoyar a quienes han sido desplazados por el conflicto armado y para comunidades que han recibido a millones de migrantes venezolanos. La idea es fortalecer servicios de agua, salud, alimentos y medios de vida.
Se suman 10 millones para Sudamérica, 10 millones más para Centroamérica, y 10,1 millones solo para preparación ante desastres. Porque sí, el cambio climático ya está aquí y la región no puede seguir improvisando cada vez que hay un huracán o un terremoto.
En el Caribe, Haití recibirá 18 millones de euros, en medio de una crisis que cada vez se parece más a un Estado fallido y otros 8,5 millones irán a la preparación de otros países caribeños ante emergencias.
Dejar de reaccionar tarde y empezar a actuar
Desde hace un año, la UE y América Latina firmaron un Memorando de Entendimiento para gestionar el riesgo de desastres. Un documento que busca dejar de reaccionar tarde y empezar a planear con base en la resiliencia y la cooperación regional.
Pero eso solo será posible si la cooperación incluye a las personas que están en el terreno, si escuchamos a las comunidades que saben lo que significa sobrevivir cada día con lo mínimo.
Continuamos el diálogo en Latank Media, ¿y si usamos esta ayuda como excusa para hacer las cosas diferente?
Abramos la conversación.
